Pensamientos sin vida.

Un muy cercano amigo me dijo que el problema de nuestra sociedad, era que la gente era demasiado estúpida, y que los estúpidos son demasiada gente. Es simple, no te has preguntado el por qué de tantos malandros, de tantas niñas embarazadas, de tanta pobreza y mediocridad, y sobretodo de tanta delincuencia; pero de manera profunda, es decir, la raíz del problema, la causa de esta situación tan precaria en la que estamos. Empecé a estudiar con un grupo de niños cuando teníamos cada uno 4 años, crecimos juntos en esas aulas de perdiciones, donde tu única preocupación es llegar y salir, y donde los años pasan y la gente cambia no solo físicamente. Albert, así se llamaba, sin nombre falso ni nada; era un niño que desde pequeño tenia todo tipo de problemas, pero que como a muchos, jamas le falto nada para triunfar; eran los típicos problemas del alumno que jamas falta en clase, ese que siempre interrumpe a los profesores,ese que siempre anda jugando con todos, ese que no le va muy bien con las asignaturas y ese tipo alumno con problemas de ansiedad, de inquietud, de falta de atención, cosas que un psicólogo a tiempo, resuelve. Crecimos y el siempre estuvo allí, jodiendo y jodiendo en clase; aun recuerdo una vez en que se bajo el pantalón cuando había suplente y le mostró a todos su pequeño y blanco paquete. Cuando llegamos a primer año, luego de tantos años disfrutando y odiando sus bromas, las cosas se pusieron mas duras, repitió unas cuantas veces, y creo que este año  ni siquiera se tomara la molestia de terminar de estudiar. Albert siempre fue un joven muy inteligente a pesar de todos sus problemas, problemas que empezaron con un padre muerto, una madre ausente y un niño sin supervision; me encantaba encontrármelo en la calle, como comúnmente solía pasar, y que me abrazara y me dijera -Sarah, y ¿tu cuando vas a ser mi novia?, yo me reía y me alejaba de el. Hace días, lo vi en la esquina de los locos perdidos por la droga, esos que se esconden en la casa de la vecina, huyendo de la muerte, esa que los busca montada en una moto y que tras una bala se los lleva al infierno. Recordé las confesiones de mis viejos amigos, esos que viven en lo profundo de un barrio, -Mi mejor amigo murió en frente de mi, - A mi papa le metieron un tiro cuando venia conmigo en la moto, confesiones de muertes en bocas de vida, ¡que perdición!. Yo crecí en el barrio sin esperanzas, de los peores que hay en Caracas, jamas salia de mi casa, y mis amigos siempre fueron mis primos que por suerte, vivían cerca de mi; mi familia es muy grande y aun así me sentía sola, me evitaban muchas cosas por miedo a situaciones que generalmente pasan cuando uno las busca y cuando menos se las espera. Hace días veía fotos de amigos que estudiaron con mama en el colegio del barrio, ese donde estudian todos, ese al que no iré jamas; una de sus viejas amigas esta viviendo en Los Ángeles, le ha ido muy bien de hecho, en ese momento le pregunte a mi mama -Y ¿tu por que no planeaste vivir en el extranjero?,  a lo que mi mama no respondió nada y me lanzo su mirada numero 9, que indica que debo meterme la lengua por el culo. Entonces pensé, que si te esfuerzas y te haces lo mas integral posible tus horizontes se amplían, pero ¡que difícil!, no muchos terminan la escuela, así como otros no pueden ir a la universidad, aun así eso no debería impedir que logres grandes cosas, muy pocos son los que corren con esa suerte de saber poco y tener mucho, mientras que hay algunos que saben mucho y tienen poco, también están los intermedios pero ¡que chucha! jamas la vida tendrá sentido con eso, y lo peor es que eso es así.

El amigo que estaba conmigo y con el que tristemente me encontré a Albert consumiendo marihuana, se sorprendió al escucharme decir -¿Por que sera que caen tan bajo? si, debe ser por los problemas que tenia desde pequeño. El, se echo a reír y dijo -Sarah, ¿tu eres estúpida?, cambia esa mentalidad de tener lastima por la gente que se hace daño ella misma, ese niño lo tuvo todo y jamas lo aprovecho, y nadie arrastra a nadie, ni siquiera tu entorno lo hace, tu eres vivo ejemplo de ello, bastante tiempo llevas en este barrio, bastante estuviste allí en su entorno y... ¿estas en eso?, ¡no verdad! el mismo lo consiguió, por querer la vida fácil y los placeres equivocados.
Entonces me di cuenta que tenia razón, no fue esa sensación incomoda en que el otro tiene razón y quedas en ridículo sin nada que decir, fue como la lección del día. Era sencillo, lo único limpio con lo que nacemos, lo único sano con lo que venimos al mundo es nuestra dignidad, nuestra imagen, nuestro ser; a medida que la vida evoluciona nos volvemos el centro de atención de muchas cosas, cometemos errores y siempre nos recordaran por ellos y usualmente por las cosas buenas que hacemos, nos llenaremos de chismes a medida en que nuestras decisiones nos dejen mal parados en algún momento, y siempre seremos algo para el ojo de alguien y una cosa diferente para nosotros mismos, pero, no hay peor cosa que darle el gusto a la gente de que te vea ser eso que ellos siempre planearon que serias. Por ejemplo, hubiese sido genial ver una foto de Albert graduándose de bachiller de la República, le callaría la boca a todos esos mal hablados que siempre dijeron que no seria gran cosa; pero el mismo se jodió el camino. Es que es así, las cosas avanzan y nosotros los humanos nos volvemos mas sedentarios e inútiles, dejamos de hacer las cosas para que aparatos sin vida las hagan, y simplemente buscamos lo fácil, lo sencillo y lo rápido.
Es cuestión de no intentar captar la luz con los ojos cuando hay oscuridad, no puedes resolver por completo un problema si no le buscas su origen, y realmente que difícil seria dar un giro a lo que somos y tenemos cuando nosotros mismos lo buscamos y lo queremos poseer.