Huesos rojos

Junio jupiter, jupiter


I lost myself on a cool damp night
Gave myself in that misty light
Was hypnotized by a strange delight
Under a lilac tree
I made wine from the lilac tree
Put my heart in its recipe
It makes me see what I want to see
and be what I want to be
When I think more than I want to think
Do things I never should do
I drink much more that I ought to drink
Because it brings me back you


Si me fuese quedado contigo habría citado a Celina en un café barato de la Av Paz, hubiese usado algún vestido corto y collar de perlas crema, una sonrisa plena, embargada de alegría. Le fuese sugerido ampliar sus horizontes, cambiar gatos persas por perros, cachorros de pantera. 

Un par de días después, ya sabiendo su respuesta, habría llamado a Adamas y le hubiese comentado la verdad, la vía láctea de la verdad, ácida y retorcida, una locura haber estado en sus brazos imaginando los tuyos y que una vez que eso sucediera tu me fueses jugado con lo mismo, un par de cartas sin color, marca española que no caduca, no lo hará.

Lilac wine is sweet and heady, like my love
Lilac wine, I feel unsteady, like my love
Listen to me, I cannot see clearly
Isn't that she coming to me nearly here?
Lilac wine is sweet and heady where's my love?
Lilac wine, I feel unsteady, where's my love?
Listen to me, why is everything so hazy?
Isn't that she, or am I just going crazy, dear?

Lilac Wine, I feel unready for my love

Junio y Saturno, Chielos

Soy un cadáver, carne y hueso que apesta, moscas revolotean y la piel se opaca, grisácea y palidecida se destiñe. Camino por las aceras junto con otros cadáveres que aceleran el paso, me tropiezan, entre dientes una disculpa y siguen su camino. Un bus donde el puesto hacia la ventana se transforma en una utopía semiroja que se difuma pasado los minutos. Soy un par de pasos que se adentran en la rutina, cuyo sistema no despide luces naturales ni aromas tropicales, soy un peso muerto que hiede, manchones oscuros en hombros y muslos, dientes amarillentos y aliento a despedida, dentro de mi hay incontables flores marchitas y especies extintas, cementerio andante que acompañado de otros sistemas que han perecido, pulula, destellan en mi vestigios de una vida antigua donde velas alumbraban malecones, definían una costa. 

Un jovencito de voz chillona, manos suaves y pequeñas, insiste que es para mi. Penetra un cadáver que no se inmuta, gime y suspira tras ficciones intensas de minutos y horas donde espera un te amo, un te quiero como si no le fuera sorpresa que estoy muerta, de mi no hay palabras que conmuevan, no le puedo engañar. Lo despacho para los jueves o viernes, a veces distrae con sus historias novelescas, sus carcajadas mientras se saca el anillo del dedo anular, como si a mi me importara. 

Es junio y no soy nada, un cadáver y ya, que no siente, no escucha sugerencias, divaga en camas ajenas, mujeres que cumplen fantasías y morenos de ojos saltones, eres mía, eres mía, soy tuya pero yo soy mía, y yo bien muerta que no siento nada, que me quedo aquí, voy para allá, pero he perecido, mis pies automáticos se mueven a cumplir ordenes espetadas por una boca inmunda que se regocija en dinero, que sigue ordenes de gordos malvivientes de títulos mayores, cobijados sobre lo alto de su escalafón. Regidos por leyes y libros de normas enumeradas donde los elementos ordenan tras sentencias bien elaboradas, las mil y un maneras apropiadas para vivir. Cadáver que aprende para comerciar su saber por dinero para vivir, para sumergirse dentro de una bola mística de aguas purpuras que pretende regir el mundo, los altos edificios bancarios y empresariales que en el terreno modelan este modus vivendi absurdo de minutos y horas, donde somos un par de huesos rojos y carne putrefacta, verdosa, que con un poco de suerte logra tener dos o tres madrigueras en el mismo condado donde cada mañana lo explotan, donde el sistema no consiste en animalitos y praderas, en centellas o fieras, sino en la despiadada calle ciega que resulta ser este mercado paralelo de alegría mutante, con brazos en los ojos y lenguas dentro de los oídos. 


Lilac wine, I feel unsteady, where's my love?
Listen to me, why is everything so hazy?
Isn't that she, or am I just going crazy, dear?

Lilac Wine, I feel unready for my love

ojala te fueses quedado en mi sistema, panteón de columnas doradas
               

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