Me quedo contigo.

Y es que suena tan exquisito, delicado, tan sencillo; todo es natural, resulta ser muy tenaz, eso me envuelve en una infinita atmósfera de comodidad ¿no? un lugar, una hora, y ahí vamos, cada uno al encuentro de... Suelo sentarme a pensar cómo logre involucrarme de esta manera, cómo logre tomarme el atrevimiento de ser un poco atrevida y de arriesgarme a simplemente sentir de nuevo todo aquel montón de nubes rozar mi cara, el cielo azul directo a mis labios y sugerir quedarnos aun cuando sé que al día siguiente dispondré de una excusa para verle. El dolor es irreversible, un poco pesado, pero logro discernir lo correcto de lo inadecuado y lo sé ¿no? aun es posible retroceder, aun puedo evitar llegar tan alto, tan alto, demasiado alto, a tal punto donde hayan muchísimos campos de flores y donde repose mi perfil, vuelva en si y no sea tu cuerpo. No lo logro imaginar ¿ahora qué le diré? que todo aquel baile fue un esfuerzo en vano, que tu y yo somos dos estrellas fugaces, las sirenas de un mundo donde si crecen los niños y que la manera en que me miras conduce a la perdición total, al completo olvido de la cordura y al despojo de toda mala energía porque al tu recordarme me envuelve un pequeño sentimiento de nostalgia, porque yo te recuerdo todo el tiempo. Dí la verdad, acéptala, que lo sabes, tu sabes... me quedo contigo. Probablemente mañana, cuando tu sabes quien disfrute de un viaje sin retorno donde el tiempo es relativo (¿lo será?) y todo lo que sale de tu boca se disipa en el aire dejando aromas, frota mi rostro, acaricia mis miedos y simplemente soy otra clase de mujer, de fantasía, de pasado, tu pasado, mi conciencia, mi actitud, me quedo sin nadie, me quedo en el pasado, me quedo contigo. Ojala supieras, las ganas de que no me olvides, lo egoísta que resulta pensar que quiero que me ames y te olvides de lo que sucedió, de las esferas al teléfono, de figuras geométricas que trazan mis dedos en tu pecho y cuando temo que pienses que estoy interesada en algo mas que tu sonrisa, tu voz, tu aroma, tu.
Pues ahora resulta que me quedo conmigo, o contigo, si, con aquella parte que finalmente tiene control en mi vida, aquella que no requiere de velas alumbrando todo el tiempo porque finalmente el fulgor que causa lo agitado de mi vida es suficiente para reemplazar las noches de frio o lo interesante sobre eso que deseamos, porque en el fondo pienso que se te puede premiar, otorgándote un poco de lo que no quieres y enseñándote a apreciar lo que tienes para que luego cuando te hayas resignado lo suficiente, se te premie con todo eso que siempre quisiste. Estar solo un tiempo para que aprendas lo importante de tener un espacio propio, de ser independiente y luego, el umbral de la mañana te recibe con la persona que corrompe lo exquisito de la soledad, de no tener nada pero tenerlo todo porque no tienes nadie que te limite, porque puedes contemplar el infinito mundo de posibilidades que no siento, no hallo dentro de mi así como una vez sucedió ayer, y no lo soporto, no me inspira ni una pizca de nobles sentimientos, siento que estoy molesta con esto por no permitirme besar otra galaxia o por privarme de la libertad de poseerlo todo y no tener limites.
Eran demasiadas cosas, muchos problemas, que si esto, que si ella, que si yo, han sido 5 años que dejaron tras si mas de 200 sentimientos diferentes, con nombres diferentes que eran registrados bajo el mismo seudónimo, bajo el mismo propósito: quedarme contigo.
Porque no te entiendo, ni un poquito, no sé si lo que dijiste era sarcasmo o si realmente estabas molesto, si probablemente lo que dije fue bastante asertivo o si de nuevo logre colmar tu paciencia y llevarte al extremo de la locura porque si, tu me entiendes, tu lo logras descifrar, y la tuviste, la concesión completa de lo que pensaba, aun así, me consume el dolor al pensar que todo aquello que te hace maravilloso sea descubierto por alguien que sin duda alguna (irrevocablemente) es mejor que yo, por el simple hecho de que yo no te poseo, no poseo tus ansias, tu pasado, tu tiempo, tus ganas, tu sonrisa, tu tristeza, tus recuerdos, a ti, ni un poco, ni ayer que te abrace, ni hoy que te bese ni mañana que te haré el amor, jamas te poseeré, y es una lastima porque yo ando por ahí tan libre, tu sabes... estrella fugaz, siento tan tuya como ayer cuando tus brazos me rodearon al irme de tu casa, como hoy que te mire a los ojos luego de besarte o como mañana cuando vayas a recogerme para no olvidarme. Es cierto, no puedo mentirte, resulta complicado recoger el ancla de esta vida en la que llevo atrapada ya por mas de 300 días, pero cómo dejar caer al fondo del vació un ancla que me lleva atada a ella, que me enseño lo que era la soledad, no dejándome sola sino estando a mi lado desvaneciéndose con el tiempo, lentamente, así, justo como duele. Yo lo sé, es cierto, fui una verdadera hija de puta contigo cuando lamentablemente y de manera indirecta fui yo quien menosprecie tus sentimientos, quien eligió la otra cara de la gran decisión, quien en cuerpo de ninfas hallo una salida mas dolorosa para deshacerme de quien todos esos días era la razón de un sin fin de alegrías; te extrañe intensamente, pensaba que si volvía, todo lo construido se iría a bajo, pero fíjate, luego de meses siendo parte del termino ''normal'' (nunca lo he logrado conceptualizar) terminamos recordándonos mientras cantamos una canción en la que te pido a gritos que no me olvides, y tu estas sobre mi, con aquel aroma tan indescriptible, con tus movimientos circulares, y la sonrisa, la colonia, los labios rosas, la noche en que me quede contigo.
Pero me convertí en lo que soy, así como te dije cuando estaba sobre ti (mala ubicación) cuando moví mi cabello de un lado a otro, y con mis menudos dedos toque tu pecho y lo dije: ''Yo soy Cosmopolita'' a lo que pensé que realmente no lo era, o que probablemente sabia lo suficiente como para serlo o que no importaba, nunca importo. Pero era una mujer (¿lo soy?) que simplemente encajaba con el estereotipo, que hacia lo que debía hacer, que al igual que el otro montón de mujeres y que el selectivo grupo de las que fueron ''tuyas'' yo era un poco ''no tuya'' del todo, porque antes de ser de alguien más tengo que ser mía, totalmente mía, conocerme, y lo hago, gracias a eso logro distinguir lo bueno de lo malo y al ser un poco testaruda y confiada, me entrego a lo que siento y no a lo que debería sentir, porque para alguien tan ordenada como yo era requerido un poco de la adrenalina de tu vida, la velocidad, lo inestable, lo que siempre va en contraparte al darme la vuelva y visualizar que no todo es limpio y que de nuevo estoy ahogándome en mis errores, en las mentiras y películas sin moraleja que invento para hallar la parte atractiva de mi vida, en la que no puedo confiar en ellas porque son tan hijas de puta como yo lo seria, y como sé que seria, como lo soy. Lo demás no importa, honestamente ya no me interesa dejar en claro lo que pienso, lo que siento, lo que planeo, a qué le temo, qué haré contigo, o lo que sea, no me interesa crear párrafos y párrafos de ideas que aunque sean bien estructuradas no llegaran a nada porque cada quien entiende lo que quiere entender y todo, todo, se tergiversa. Por lo que entones quedamos así, ellas no me importan, ella no me importa, ninguna me inspira una pizca de confianza, pero ahí voy, corriendo en el campo de flores moradas, sintiendo las nubes rozar mi cara, pensando en cómo lo trágico y el drama sale tanto a relucir en mis pensamientos mientras mi vida esta llena de dichas, lo incorrecto de sentirme así tan desgraciada aun cuando no tengo motivos para ello, aun cuando te tengo a ti, a él, a ella, a todo aquello que sin intención alguna me proporciona estabilidad máxima en otra noche durmiendo en un lugar al que no pertenezco, porque es cierto, yo no quiero estar aquí. Es un tanto extenso, ni siquiera es una despedida oficial, pero unos días serán suficientes para que tus labios repitan el ultimo sentimiento que fue plasmado sin color en mis hojas digitales, luego de tantos desamores, de las caídas por confiar en las personas equivocadas, de la perdición en lo monótono, de la falta de material para pensar y de lo mucho que deseo que todos sepan que te amo y que si, si, me quedo contigo, y como última propuesta, es un tanto parecida a las anteriores porque causa un agridulce dolor.
Mi cabello crecerá, pero seguiré siendo un poco menuda para mi altura y si, estaré en un lugar frió temiendo que el fin del mundo sea con agua, recordando a quienes vivos entendieron mi arte, a quien ahora no está y motivó que continuara buscando la respuesta a una pregunta que es tan conocida como su respuesta, porque simplemente no me importa lo que piensen, lo que hagan, hoy me libero de ellas y me quedo contigo.

 


                               Sarah Parker.


  

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Peter de mayo

Al otro lado del río y entre los árboles

Cuentos de luz en un cuarto de oscuridad en Amanda 215