Boda de los 70's.

Así que eso dijiste, que el tal hombrecito que siempre vestía de negro y susurraba el coro de cierta canción de Slipknot tenía razón. Difícil escucharte decir esas dos palabras juntas. Que otro tenga razón me recuerda por qué siempre quedo como una tonta cuando estoy contigo, y lo mucho que considero hábil mi capacidad para mentir. Realmente él no había dicho eso, lo había dicho yo; solo que es difícil que una opinión proveniente de mi persona te parezca algo más que simple tedio unido a lo sonoro de mi voz. Como nunca dije, siempre fui de expectativas más altas que las tuyas, probablemente porque yo si tome en serio la noble labor de esperarte, aun sabiendo que era una falta de respeto que cayeras dormido cada vez que conmigo estabas. ¡Pues él tenía razón! y la verdad es que si me pongo a pensar en lo complicado de nuestra historia (él y yo), llegaría a la conclusión de que en algún momento de tanta charla junta, quizás el realmente me haya dicho eso. Así era, su boda de los 70's transcurría entre lejanos parajes para renovar su visa, y alejarse de la realidad que a todo mundo rodeaba. Problemas y más problemas, que si la familia de su novia no le permitía salir con ella, que si su prima hablaba pendejadas con su mama y luego no podían verse un mes, que si no tenía dinero para alquilar un cuarto para ambos, que si le tomaría cien años y medio adquirir un auto, que si esto, que si lo otro, mil y un adversidades. O al menos así parecían, porque se les caía el mundo entero cuando no podían verse, cuando ella dibujaba sus ojos y él la nombraba en canciones. Así fue con nosotros. La misma faena infernal, en la que si yo no podía te hundías y si te hundías yo me ahogaba contigo. Así sucedió, la monotonía y la falta de creatividad de ambas partes, seguidas del evidente orgullo de mujer, fue carcomiendo poco a poco lo que habíamos construido. Parece mentira, que su Boda de los 70's tenia las mismas canciones que ayer estabas silbando. No es suficiente hablar y hablar y gastar el tiempo hablando, si con las mismas palabras amarras el tiempo y solo lo vas gastando ¡todo ese tiempo perdido! queriendo estar allá, tu buscando algo más, prometiendo un futuro incierto que solo incrementaba las estúpidas expectativas de que un día llegaras sin previo aviso, sin tanta mariquera y simplemente de la nada, hicieras algo estúpido; porque déjame decirte algo amigo mío... ¡que aburrido eres! ¡Que huevo sin sal! cómo pretendes dejar caer en tu hombro el peso de un cuerpo de mujer si con las manos haces malabares. Esto no es un juego, es mucho tiempo malgastado entre emociones que realmente no están definidas; que si me llamas estoy bien, que si dices algo estúpido se me desgarra el alma en un tajo, que luego trancas la llamada luciendo afligido, y entonces cierta lastima sale de los rincones donde estuvo agazapada, y luego, tres horas después cuando te acuerdas, ya consigues algo nuevo que hacer y todo lo anterior pasa a segundo plano, mientras yo simplemente soy una escoria humana, un ser humano inútil que solo malgasta el tiempo pensando en penurias mías y ajenas. Simplemente estoy jodida de eso, de la poca armonía que creamos cuando no estamos uno al lado del otro tan solo pensando en nosotros mismos, porque eso si amor mío, ¡cómo me encanta que seas un narcisista nato!  ¡Un egoísta mío! es decir, tú me tomas para ti porque si no fuera de ese modo, nada de esto sucedería. Más allá de lo mucho que admiro la manera en que amas, deseo no darle prioridad a los pensamientos negativos, como que contigo pierdo mi tiempo mientras que allá afuera, lejos de tus horas perdidas, hay alguien dispuesto a darme mucho más. Probablemente alguien que sin intentar con mucho esmero, me otorgue la importancia que durante algunos meses has dejado de ofrecerme. Pero no, puedo actuar como la propia puta para provocar, causar revuelo entre sus hormonas, pero sabes que las mejores vibraciones de lo exquisito tan solo parten de ti; y lo sabes, lo sabes mejor que nadie en este redondo y miserable mundo, porque el día en que las interesadas desaparecieron y los sedientos fueron asesinados, tú quedaste para mí. Probablemente haya sido eso, aferrarme a ti de esa manera, ser independiente de tus malos chistes o los sonidos que haces cuando estas aburrido, porque no solo eres mi Boda de los 70's sino mi mejor amigo, mi leal compañero, el único ser humano en este redondo y miserable mundo que me conoce de pies a cabeza tal como soy, cada debilidad, cada fortaleza, los viejos defectos y las grietas de mi piel en cada pedazo de mi cuerpo. Entonces dijiste que él tenía razón, y la verdad es que la razón era mía. Y es así, no importa cuántos pensamientos negativos o positivos bailen conmigo cada noche, el mundo sería un lugar mejor si cuando estamos dispuestos a dar o recibir recíprocamente, todas las personas al rededor, los factores económicos y cada página de pasado no fueran un problema, un tema tan determinante a la hora de desear llevar a cabo algún plan; que si aquella pieza es compartida, que si el tráfico llego al aeropuerto, que si mi madre es lenta en discurrir, qué sé yo qué otra cosa más que represente un problema.   
Al fin y al cabo todos pueden irse a la mierda, a mí solo me interesa que esto vaya bien, porque si no, ¡ay amigo mío! ¡ay amor mio! El mundo se me…  

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